Hace poco vi la película El curioso caso de Benjamin Button…lo sé, estoy un poco desfasado en cuanto a cine, pero eso no es nada para alguien que como yo a estas alturas de la vida no ha visto Forrest Gump, lo que se ha convertido ya en una cuestión de orgullo personal, qué cojones. La cuestión es que ahí tirado en el sofá de casa estuve pensando que la historia me sonaba de algo, oía campanas pero no sabía muy bien dónde y he tenido que esperar hasta hace un par de días para verlo todo claro. Skin es más joven que antes, es más, me atrevo a decir que debe andar por los dieciocho recién cumplidos, partiendo de la base que cuando pasó anteriormente por aquí a finales de 2009 tenía 20. Las matemáticas y yo, vidas paralelas.
Pues sí, el miércoles nos acercamos a la madrileña sala La Riviera para ver a Skunk Anansie, tras no haber podido hacerlo en su última visita, donde trajeron en el zurrón todos sus grandes éxitos y nos recordaron que aunque se fueron estando en lo más alto, allá a finales de los 90, han vuelto en la misma situación, con la salvedad de que ahora son diez años más jóvenes…tal cual.
La gira que les ocupa en la actualidad se debe a la promoción de su cuarto álbum de estudio Wonderlustre, publicado el pasado 2010, y que sinceramente no tiene nada que envidiar a sus antecesores, aunque quizá el hecho de la cercanía de fechas con su actuación anterior ha restado cierto impacto y no consiguieron el lleno total. La cuestión es que pasadas las 21:30 horas los británicos saltaron al escenario tras un telón semi transparente que compaginado con un buen juego de luces agigantaba las siluetas de los miembros de la banda, que se lanzó a por todas desde el inicio con "Yes It's Fucking Political" y la grandiosa "Charlie Big Potato". El vozarrón de la pantera andaba aún algo descontrolado, pero estos dos temas sirvieron para calentar tan cotizadas cuerdas vocales y para cuando sonó "Because of You" cada cosa estaba en su sitio.
"God Loves Only You", tema que abre el último disco fue la primera novedad en sonar y lo hizo realmente bien. Es un gran tema, aunque como todo lo nuevo adoleció de cierta sintonía con el respetable, quién dio todo de sí con los grandes clásicos. Tras algún riff espontaneo llegó el turno para "100 Ways To Be A Good Girl" como preámbulo de tres grandes momentos que vinieron de la mano, "Secretly", "Over the Love" y "I Can Dream", en lo que fue una de las mejores fases del concierto.
Las nuevas "The Sweetest Thing" y "My Ugly Boy" llegaron una detrás de otra, justo antes de esa maravilla que se llama "Weak", seguida de "Brazen (Weep)". Para entonces Skin cantaba ya subida a la valla que separa al público del escenario, y se había paseado entre el respetable más de una vez, sin olvidar su juego continuo de piernas a lo Mohamed Ali y esa energía que desprende de principio a fin. "My Love Will Fall" y ese bajo de inicio tan estupendo dio paso a la locura con "Twisted (Everyday Hurts)", una buena "Feeling the Itch" y casi sin descanso "On My Hotel T.V.", "Tear The Place Up" y "The Skank Heads (Get Off Me)"
Tras un ratillo para recuperar fuerzas terminaron, para deleite de los asistentes, con una gran interpretación de "Hedonism (Just Because You Feel Good)", la preciosa "You Saved Me" y un buen final con "Little Baby Swastikka". Tras hora y media larga de un setlist muy compensado donde en cada momento supieron manejar el estado de ánimo del público, con un sonido potente y de bastante calidad, teniendo en cuenta las limitaciones del recinto, nos fuimos todos contentos, tranquilos sobre todo, y sabiendo que hemos recuperado a una de las grandes bandas de los 90…los jóvenes Skunk Anansie.
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